Recuerdo olores…

Antes de estar en esta empresa, trabajé durante unos seis meses en otra, allí teníamos un jefe de los malos, de los que monean todo el día, trabajar trabajaba, pero sin control ni metas, se iba por derroteros e inventaba cosas nuevas cada dos por tres, que nadie le había pedido y que no sabíamos para que lo necesitábamos, por más que el se empeñara en explicarlo.

Mis compañeros y yo andábamos mareados entre sus peticiones y la mala cara de su jefe, que terminaba saltándoselo por la imposibilidad de entendimiento que generaba.

Locuaz y divertido en el momento que había que irse a tomar café, se consideraba lo más alto del “sex apee“. Desde que se inventó raparse para evitar tener que reconocer que te estás quedando calvo, el se vio, aún más guapetón y atrayente, (en este punto aclaro que no tengo ningún problema con la moda y que no me parece hortera ni nada parecido, que suele quedar bien, y que no me molesta en absoluto) lo veo una solución digna. Lo que me molestaba precisamente de su look, era el olor que generaba… no sé si es habitual o como va esto de afeitarse, pero el tipo se ponía alcohol todas las mañanas después del afeitado.

Es un olor dulzón, empalagoso y como de hospital. Me ha hecho totalmente sensible al aroma asqueroso, es posible que el alcohol no huela mal, no tenía recuerdo de que eso me molestara hasta que no empecé a olerlo, todas las mañanas, después justo de desayunar.

No empezó a molestarme nada de eso, hasta que no tuve que me empezar a lavar mi bolígrafo porque lo chupaba y se hurgaba las orejas, o se lo frotaba por la calva, cuando estaba tratando de pensar. No soy demasiado asquerosa sobre los hábitos de higiene de la gente que tengo alrededor, soy bastante tolerante, siempre y cuando no me toqueteen mis cosas con sus manos pringadas de diversos fluidos corporales…

También solía comentarte que había estado haciendo en el baño, si lo habías buscado y no lo habías encontrado, vamos, una persona totalmente abierta, que no tenía ningún pudor en compartir su intimidad con el prójimo, una persona desprendida… Y nunca mejor dicho… una vez tuve que ir a su ordenador… a escribir algo en su teclado… y aún tengo el trauma…

Todo este asco con el que os deleito esta mañana tiene un origen, aquí en mi oficina, en la que llevo ya mucho tiempo rodeada de la misma gente, hoy, como señal ineludible de que nuestro pasado nos persigue y nos marca… no puedo evitar oler, no sé de donde ha salido… Ese olor dulzón, empalagoso y como de hospital, y no consigo identificar al interfecto sin corazón que me ha hecho recordar todo esto.

Saludos,
YoMisma

13 comentarios:

Laia... dijo...

Siento decirtelo, pero me temo que vas a tener que irte acostumbrando... Con toda la psicosis está que se ha creado con la gripe ponle-el-nombre-que-quieras, recomiendan lavarse las manos con alcohol, parece ser que van a tener que ponerlo en los baños las empresas.

Conozco a alguno/a que otro/a que ya ha comprado un potecito (-Los venden en el mercadona, no los habeis visto? -No...)de alcohol en gel para llevar en el bolso.

Javi dijo...

Tengo una barba de adolescente, así que puedo pasarme una semana sin afeitarme que casi ni se nota, pero te aseguro que Alcohol tras el rasurado no me lo he echado en la vida.

Recuerdo un compañero que apestaba, de veradad, era repugnante cómo olía. Cuando se cambiaba en el vestuario teníamos que esperar diez minutos a que desapareciera el olor. Se bañaba en colonia, con lo cual sabías que había estado ahí porque recibías un olor Brumel (no te creas que usaba otra) y luego un olor dulce y amargo y al final y aroma a rata muerta que ha vomitado una rata muerta que se comió..., en fin, ya sabes por dónde voy.

Desde entonces no puedo olor la colonia Brumel. Será porque el olfato es el más evocador de los sentidos y activa nosecuantas zonas del cerebro.

maba dijo...

dicen que es el sentido que tenemos menos "adiestrado" pero es una pasada cómo trabaja!

flipo con el comentario de Laia

besos..

M dijo...

Pfff, es que el olfato es el sentido que más capacidad de recuerdos asociados tiene, para bien o para mal. Y es verdad que cuando se te mete un olor horrible, es muy difícil quitárselo :S
Feliz lunes!

Yo y solo yo.. dijo...

Habeis probado a abrir la ventana y qu ese aire la habitación jajajaja

Capitán Clostridium dijo...

Puff. ¿¡Las manos con alcohol!? Vaya gripe...

Es muy duro volver, dejar la hamaca y el olor a bronceador y enfrentarte al aire acondicionado y a las axilas de los compañeros/as, y si encima alguien saca brillo a sus calvas con alcohol, ya te digo...

YoMisma dijo...

:( jooo...

Pues con tanto miedo comunitario que se está formando... no me voy a quitar dicho olorcillo de encima nunca...

jaja

Saludines,
YoMisma

Wenanena dijo...

Neni y eso no escocerá??? no me jodas... en la calva alcohol justo después de afeitarse ufff ke mallll y ke pestuzal!!! hubiera dao mejor resultado si se hubiera echado nenuco mmm con lo ke me gusta ese olorcico.

Yopopolin dijo...

si es que hay cada uno que se pasa con las lociones y esas mierdas... Mejor todo natural, que pasarse con los aromas y no haya cristo que te aguante al lado... uf!

bss

Fiebre dijo...

¡Por diosss! ¡Qué panorama!

Me he quedado estupefacta. Si a mi no me importa que te hurgues las orejas, pero con tus propios bolis, claro.

Lo de los olores que se te quedan en la pituitaria asociados a un momento, o a una persona, es de tesis doctoral, y mira que no soy especialmente delicada...

Deambulando con Artabria dijo...

Yo tengo una compañera que viene muchas veces con la ropa sucia, el pelo le brilla casi todos los días de la mierda que tiene y huele bastante mal. EStos días que estuve de vacaciones ocupó mi sitio. Hoy al abrir el cajón me encontré con una cucharilla usada de yogur. Imagínate.......

Cuca dijo...

Da ascazo, si, y hay un guarrete por oficina. Mi cruz es un consultor externo que viene una vez por semana, y que parece ser que sólo se ducha los domingos (y suele venir los jueves!!!). Tengo un botecito de agua de colonia de te verde al limón que uso de ambientador los jueves, y funciona. Camufla muy bien sus efluvios ponzoñosos. Aunque luego mis compañeros me acosen para que comparta los "caramelos de limón" que dicen que escondo.

X dijo...

Pues ha sido Proust, y su madalena. En serio. :-)