Y lo odió con todas sus fuerzas, no permitiría que eso pasara, no pensaba ser amiga de la persona que más daño le hizo en toda la vida.
Lo desterró, e ignoró cualquier intento de acercamiento, las heridas tardan en cicatrizar a cada uno le tardan su tiempo, y el suyo sería infinito.
Hace ya más de cuatro años que juró que nunca serían amigos, que era impensable ser amiga de alguien que la había traicionado de la peor manera, no se lo merecía, y el hecho de darle su amistad, solo le convertiría en el ganador de toda esa situación dolorosa.
Lo odió todo este tiempo, hubo una tregua cuando murió, al menos la convirtió en una persona más tranquila, pero esa situación no haría que lo recordara como maravilloso, es un topicazo, alguien muere y es verenado por todo aquel que lo conoce, se portó mal y punto, y dejar de estar vivo no justificaría sus actos.
Ahora con el tiempo, después de seguir viviendo, aquí donde la dejó, tiene que reconocer aunque le fastidie, que si, que lo era y lo seguirá siendo, que no tiene muchos amigos como él, que era cierto, y que ella se equivocaba, se dejó cegar por la ira, pero hay que reconocer, al menos, que nunca le mintió, que no trató de escaquearse y que le presentó la verdad, dura y cruel, tal y como era. Tenía todos los ingredientes para poder librarse, podía haberlo negado y eximirse de todo, podía haberle contado un cuento y dejarla vivir en una mentira.
Pero se lo contó, y la sujetó mientras lloraba, mientras le increpaba y le insultaba, se quedó a su lado aguantando el chaparrón, aceptando su error, aunque fuera un error despreciable.
Su verdad, la única verdad dolorosa, le permitió tener todos los ingredientes para poder mandarlo a la mierda y apartarle de su lado, podía haberla mantenido allí con una mentira, pero prefirió darle la verdad.
La gente que te quiere suele hacerte llorar, la gente que te quiere no se conforma con darte mentiras con lazos, espera que al final lo entiendas, aunque pasen muchos años.
Le fastidió tener que darle la razón, en esto también, muchísimo. Pero entendió, que aunque fuera horrible, era la mejor forma de actuar, dadas las circunstancias.
“Siempre hemos sido amigos". Ahora lo entiendo.
Saludines,
YoMisma