J, era mi profesora cuando yo tenía cuatro años, por entonces yo era dulzura y tranquilidad, un papel en blanco, Madre y yo aún no habíamos descubierto aquellos problemas que nos traerían discusiones a partir de la adolescencia, así que se podría decir, que estaba vacía de malas experiencias.
Por eso, esto es un trauma.
Estaba haciendo un dibujo, y fui a enseñárselo a J, ella estaba riñendo a un niño, esperé mi turno, y cuando terminó le enseñé mi dibujo, se giró de mala gana, aún enfadada con el otro niño, y me dijo que mi dibujo era una mierda.
Aún recuerdo qué pinté, eran tres personas jugando a la comba, una niña saltaba y una de las que hacían que la cuerda girara era J.
Lo recuerdo nítidamente, como si fuera hoy, me sentí rara por haber sido tratada así, creo que fué mi primera crítica negativa, no propiciada tanto por mi capacidad, si no por el estado de humor del ser humano con el que me interrelacionaba, fue en aquel momento en el que me propuse tratar a cada uno como mereciera, no por lo que hubiera pasado antes, esto implicaba obviamente, que si estaba enfadada con alguien, no permitiría que mi ira, se extendiera más allá de la persona en cuestión.
No se me ha olvidado en todo este tiempo y sigo haciéndolo, y sigo como entonces sintiéndome rara, aunque ahora ya sé lo que es, es furia contenida, por seguir sin entender tanto tiempo despúes como la gente puede excusarse en otros problemas, para tratar a personas que no tienen nada que ver con la situación con crueldad.
Y mi furia, aun con una de las cosas que más me molesta, sigue siendo contenida, sigo sin explotar con quien no lo merece.
Solo enrojezco de ira.
Hay cosas que no cambian nunca y de las que me siento orgullosa.
Saludines,
YoMisma
Estilo "ya tu sabeh"
Hace 3 meses
12 comentarios:
La tal J. no merecía el título de profesora. Gracias por haber aprendido la lección de otra manera.
A veces aprendemos a fuerza de golpes....Tú sigue sacando la magistral lección de la vida. Besos
Menos mal que, a pesar de tu tierna edad, supiste sacar la parte positiva de la experiencia y te convertiste en una persona mejor que la tal J. esa...
1 besazo, guapa!
Menuda la tipa!!!A mi esq la crueldad gratuita me enerva...
Hay gente que no tiene ese control, que las palabras se le van sin pararse un momento en pensar a quién se lo están diciendo, que necesitan soltarlo y les da igual a quién. Así que, bien por ti.
Ese tipo de cosas son de las que nunca se olvidan, son tan injustas que, de una u otra forma, se quedan grabadas. ¿Cómo se le puede contestar eso, así sin más, a una niña de 4 años? No soy capaz de entenderlo.
¡Pues menuda profesora...!. Hoy mismo hablaba con mi madre de algo parecido. De gente que suelta "bufidos" a quien no tiene nada que ver con su amargura, y de gente que nunca suelta bufidos por muy amargada que esté. A mi lo que me fastidia es que a día de hoy, si me tratan con crueldad inmerecida me sigue "traumatizando", pero bueno, poco a poco :-)
Besitos.
Aunque fuera de malas formas, aprendiste una leccion importante que te sirvio para ser mejor... miralo por ese lado!!
Porque a mi si que me pasa, te enfadas con uno, luego viene otro... y al final llega el que no tiene culpa ya se lleva la bronca! :S
Si esa señora supiera el daño que te hizo y lo que supuso para ti se arrepentiría mucho de ese gesto (ese espero).
Bien que logres no pagar los platos rotos con los demás, es muy difícl a veces.
Weno, pues yo creo que si gracias a ese gesto tan feo de tu profe ahora tienes esa característica tan positiva y envidiable, se puede afirmar que no hay mal que por bien no venga, no? Un beso!
Siempre he pensado que las profesiones que se trabaja con gente, como por ejemplo: médicos, enfermeras, profesores etc..., a parte de la cualificación de sus estudios, deberían hacer un examén de vocación de la profesión, porque estoy segura que más de la mitad son unos amargados en su trabajos que ni le gusta ni nada y eso se refleja en como tratan a la gente!
Besos
Seguro que la pobre J estaba en ese monmento harta de niños.
un besito
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